Cuentan los antiguos que las hadas tienes guardianes que vigilan sus moradas.
Las lagartijas son uno de ellos. Andan por los alrededores, vigilando las entradas a sus casitas. Si algún intruso se acerca más de la cuenta, salen corriendo a avisarlas y así poder camuflar sus pequeñas moradas, claro está, siempre con magia. Hacen desaparecer las entradas de su hogar y con ellas, a las propias guardianas, las lagartijas. Por eso cuesta tanto encontrarlas una vez salen corriendo.
Si las ves, ya sabes qué están haciendo...
Cristina de Arcos
2 comentarios:
Me encanta, sobre todo la historia, del saber por que mas lagartijas se van tan rápido y no las encuentras después.
Muchas gracias Liryum!! me ha hecho mucha ilusión que te guste la historia ^^
Ahora ya sabemos por qué se van corriendo! :D
Un besito!
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